MÁS RÁPIDO, MÁS BARATO
De niño aprendí a apreciar "el proceso" al momento de hacer las cosas... gracias a LEGO 😉
Desde entonces siempre que deseo aprender algo nuevo, o bien, mejorar lo que ya he aprendido, intento seguir algún proceso que me permita obtener buenos resultados de forma eficiente. Fue así como llegué a conocer la REGLA DE LAS 10MIL HORAS, la cual se basa en que es necesario dedicar 10mil horas de estudio y esfuerzo continuo para obtener un grado de "maestría" sobre algún tipo de disciplina, no importa que sea; arte, deportes, música, idioma, cocina, mecánica, etc, etc... dedicar 10mil horas garantizará alcanzar un dominio sobre dicha actividad.
Seguir la regla de las 10mil Horas también se puede resumir a que para dominar algo es necesario dedicar al menos 8hrs al día por 3 a 4 años para conseguir dicho resultado.
Siendo joven, así lo hice, dediqué esas 8hrs al día durante 4 años en aprender como ser un buen Game Artist... y puedo decir que lo conseguí.
Sin embargo, en mi constate búsqueda de nuevos procesos, me encontré con otro principio que se anteponía al dogma de las 10Mil Horas, el PRINCIPIO DE PARETO, o como se le conoce popularmente, la REGLA 80/20. Básicamente se describe como que el 80% de tus resultados depende del 20% de tu esfuerzo.
Y al hacer un análisis retrospectivo, me di cuenta de que eso era verdad, ya que no solo tenía que ver con mi formación como artista, sino mi camino profesional y mis logros personales. Un ejemplo, el 20% de los juegos en los que he participado me permitieron obtener el 80% del conocimiento y experiencia con lo cual puedo seguir trabajando y compartiendo con mis estudiantes.
Así que finalmente, pude entender que aún cuando la Regla de las 10mil Horas es excelente para realmente conseguir dominar una disciplina, no es necesario conseguir el nivel de "maestría" para obtener excelentes resultados, solo basta dedicar un 20% del tiempo y esfuerzo para conseguir el 80% de lo que esperamos... y aquel otros 20% de lo que esperamos obtener, le podemos dedicar con más tranquilidad y paciencia el resto de nuestra vida para obtenerlo.
La práctica hace al maestro, de eso no hay duda, pero para obtener resultados efectivos, en poco tiempo y esfuerzo, es necesario darnos cuenta de que no necesitamos ser maestros de nuestro arte, simplemente ser profesionales y pragmáticos, aprendiendo a trabajar inteligentemente, ya que es de esa forma en como podremos hacer mucho más sin la presión de querer dominarlo todo... no se necesita, solo basta un 20%.
